Entre 2015 y 2020 se ha denunciado de manera oficial la desaparición de 217 personas en Guasave. Sin embargo, para el colectivo de búsqueda Rastreadoras de Guasave, los casos son muchos más ya que hay familias que por alguna u otra razón deciden no interponer la denuncia correspondiente. Desde su fundación en diciembre de 2018, el colectivo ha ayudado a encontrar los restos de 17 personas en distintas fosas clandestinas del municipio.

Por Sergio Ramos.

La mañana del 8 de agosto de 2016, la señora Rosa María Coronel Rivera recibió una llamada en la que le informaban que su hijo Espiridión Ávila Coronel, de 36 años de edad, no había ido a dormir a su domicilio en la colonia Infonavit, municipio de Guasave, por lo que se encontraba desaparecido.

“Un día antes hablé por teléfono con él a las 10.30 de la mañana. Platicamos 17 minutos. Yo lo noté muy tranquilo. Al otro día me habló la muchacha con la que vivía para decirme que no había llegado a dormir y que estaba desaparecido. Pasó el sábado y el domingo pusimos la denuncia en la Fiscalía de Guasave”, señala Rosa María en entrevista con DeprimeraNoticias.

Casi cinco años después de la desaparición, Rosa María sigue sin tener noticias de su hijo. Hay una carpeta de investigación abierta en la Fiscalía General del Estado, pero no hay avances, no hay detenidos, no hay indicios. En resumen: no hay investigación.

Ante la desesperación de no tener noticias de su hijo, sin saber qué hacer, a qué autoridad pedir ayuda, por dónde comenzar a buscar, decidió acercarse al colectivo Rastreadoras del Fuerte, liderado por Mirna Nereida Quiñónez, para exponer su caso y pedir asesoría.

“Pasan dos años de desesperación, yo estaba muy afectada y sola en mi cuarto me puse a pensar qué podía hacer para encontrar a mi hijo. Entonces me surge la idea de invitar a otras personas, madres y padres en la misma situación aquí en Guasave. Entonces abrí un grupo en redes sociales invitando a la gente a que se uniera y le marqué a Mirna para pedirle que nos apoyara y nos guiara porque ella ya tenía experiencia y conocimiento”, señala Rosa María.

El 4 de diciembre de 2018 nace el colectivo Rastreadoras Guasave, integrado originalmente por unas 20 familias que compartían el mismo dolor de tener a un hijo, a un hermano o a un padre desaparecido, abandonadas por completo por las autoridades que nunca iniciaron ninguna investigación para dar con su paradero.

Deprimera Noticias (DP): Platíquenos cómo se dio esta primera reunión en la que se formó el colectivo Rastreadoras Guasave.

Rosa María Coronel (RMC): Luego de que publiqué el grupo en redes sociales, se acercaron muchas familias, todas en las mismas condiciones: que tenemos un hijo desaparecido, que se desapareció en tales fechas, en tales condiciones. Y pues estábamos todos con el mismo objetivo: salir a buscarlos y encontrarlos. Esa primera reunión fue en la plaza de la Iglesia de Guadalupe, aquí en Guasave, donde de hecho seguimos haciendo todas nuestras reuniones. En un principio acudieron unas 20 familias. Pero de ahí en adelante se fueron integrando más y ahora somos 32 familias. Había madres, padres, hermanas, hermanos de personas desaparecidas. Mirna nos acompañó en esa primera reunión y nos explicó la situación, nos dijo cómo había surgido su grupo, nos agradeció que estuviéramos unidas, siempre se solidarizó con nuestro dolor y nos apoyó.

DP–¿Cómo fue la primera búsqueda que hizo el colectivo?

RMC–Nos tocó ir a un lugar aquí afuera de Guasave. Mirna nos llevó porque nosotras no teníamos en qué movernos. Ella también nos proporcionó todo el material porque nosotras no teníamos nada. Nos dijo que había que aprender a leer la tierra y nos dio indicaciones de cuáles son las características de los lugares donde hay fosas clandestinas, el hundimiento y los relieves del terreno.

DP–¿Cada cuánto salen a las búsquedas?

RMC–Cuando nos alcanza el dinero salimos dos veces por semana.

DP–¿Cómo deciden en qué lugar buscar?

RMC–Por medio de las redes nosotros hemos pedido el apoyo de la ciudadanía para que, de manera anónima, nos ayuden a ubicar lugares donde pueda haber fosas, pero lamentablemente no hemos contado con la participación de la gente. Entonces nosotros salimos a hacer rastreos a los lugares que nosotros conocemos aquí en Guasave que son propicios para esa gente para realizar sus hechos ilícitos.

DP–¿Cuántos restos han encontrado?

RMC–En equipo con la Comisión Estatal de Búsqueda se han encontrado 17 osamentas humanas. Todas han sido encontradas en las inmediaciones del dren Burrión, junto a Casa Blanca. Entre los restos también ha habido mujeres. El 17 de febrero de 2021 se encontraron dos mujeres.

DP–De estos 17 cuerpos en cuya localización ustedes han participado cuántos ya fueron entregados a sus familiares.

RMC–En la funeraria Sedano de aquí de Guasave fueron depositados los primeros doce y los últimos tres. De esos quince restos en la Sedano, ya se liberaron seis y quedan nueve en resguardo.

DP–¿De estos que se entregaron a sus familias alguno pertenecía algún integrante del colectivo Rastreadoras Guasave?

RMC–No. Todos eran personas buscadas por otros colectivos en Los Mochis, Juan José Ríos y Mazatlán.

DP–¿Han recibido alguna amenaza?

RMC–No. Nunca. Ni hemos recibido amenazas ni llamadas anónimas para recibir información de ubicaciones. Aquí todo es cuestión de conocer el terreno y buscar, y como dice Mirna, aprender a leer la tierra para dar con nuestros desaparecidos.

DP–Recientemente se dio el caso de un joven de Guasave que tras ser privado de la libertad en Los Mochis fue liberado una semana después. ¿Este es un caso excepcional o ustedes tienen informes de otros casos similares?

RMC–Qué bueno que preguntas eso. Hemos sabido de otros casos de muchachos aquí en Guasave a los que se han llevado y a los que afortunadamente los han regresado. De lo que nosotros nos enteramos, de las personas que se acercan al grupo, tenemos cuatro casos más de muchachos a los que han regresado. Entonces pues sí ha servido de alguna forma que nosotros publiquemos y que les hagamos una ficha y que, utilizando las mejores palabras que salgan de nuestro corazón, les pidamos a esas personas que los tienen, que los liberen porque hay una familia que los espera.

DP–¿Cuántas personas desaparecidas hay en Guasave de manera oficial?

RMC–De 2015 a noviembre de 2020 hay 217 personas reportadas en la Fiscalía de Sinaloa como desaparecidas en Guasave. De esas 217, cinco personas se recuperaron. En la fosa común hay 268 cuerpos, de los cuales, no sabemos cuántos desaparecidos hay ahí porque los datos son de 1998 a 2020. Recordemos que el Laboratorio de Genética que tenemos en Culiacán entró en operaciones en 2016. Entonces es la pregunta que nos hacemos: cuántas personas hay en la fosa común desaparecidas antes de 2016. También hay que ver que las cifras que tiene la Fiscalía es por denuncias que recibe, pero hay muchas familias que no denuncian, sus motivos tendrán, no lo sabemos nosotros. Por eso no podemos manejar cifras exactas. Los casos que nosotros conocemos es porque se ha hecho una denuncia ante la fiscalía por parte de las familias.

DP–En su caso particular, ¿las autoridades alguna vez se han acercado a usted para darle a conocer algún avance en las investigaciones por la desaparición de su hijo?

RMC–Ningún avance. Mira, desafortunadamente con todo este movimiento que hicieron de llevarse las oficinas de aquí de Guasave a la zona norte, no tenemos una agencia especializada en desaparición de personas. Esa está en Los Mochis. Le hemos explicado a las autoridades que necesitamos una extensión en Guasave de una agencia especializada por la situación en la que estamos viviendo de que no hay investigaciones. Aquí se presenta la denuncia y la carpeta ahí queda, no hay avances. Necesitamos una oficina aquí de un área especializada que nos atienda los casos de las personas que tenemos desaparecidas. Para nosotros es muy desgastante estarnos moviendo porque económicamente no hay modo. Aquí en el Ministerio Público sí te atienden, no lo voy a negar, te dan la atención, te reciben la denuncia, pero lo demás, ahí queda, no hay avances. Al menos yo lo digo por las personas que tenemos registradas en el colectivo. Ninguna tiene investigación.